5 enero
Un año más en la mágica noche de Reyes varios voluntarios de la Fundación se convierten en Melchor, Gaspar y Baltasar para visitar a los residentes de la Casa Misericordia que están más dependientes y enfermos para llevarles una sonrisa, villancicos y un regalo.
El regalo sin embargo nos lo devuelven ellos con creces al ver la ilusión con la que reciben la visita que les devuelve a la niñez que tantos buenos recuerdos les trae.